5 remedios para eliminar el exceso de sal y grasa en nuestro organismo

La sal y la grasa son esos dos grandes enemigos de la población, dos bombas silenciosas que se instalan en nuestro organismo y que, poco a poco, van causando estragos: hipertensión, aumento del colesterol malo, sobrepeso, disfunciones renales, problemas cardíacos…

Todos estos problemas se deben en gran medida a unos hábitos de vida incorrectos y, sobre todo, a una cultura alimenticia que fomenta la comida de baja calidad, sin nutrientes y con alto contenido en sal y grasa. También hemos de concienciarnos de que este no es un problema exclusivo de la sociedad adulta, en absoluto. En los últimos años los índices de obesidad infantil también son preocupantes.

¿Qué tal si empezamos hoy mismo a mejorar nuestros hábitos y a esforzarnos por tener una mejor calidad de vida? ¡Estupendo! El primer paso va a ser entonces depurar tu organismo y eliminar el exceso de sal y grasa en tu cuerpo. ¡Toma nota!

1. Licuado de perejil y limón

Este licuado es ideal para tomarlo a lo largo de un día, siendo muy importante que el primer vaso te lo bebas en ayunas nada más levantarte. Nos va a ayudar a depurar el organismo y eliminar ese exceso de sal, facilitando la función renal.

Además, es un potente antioxidante rico en vitaminas que nos permitirá poner en marcha nuestro metabolismo para quemar grasas, gracias sobre todo al jugo del limón. Para una buena depuración, sería recomendable tomar este licuado durante tres días seguidos.

Toma nota de lo que debes hacer.
Ingredientes
5 ramas de perejil limpio.
El jugo de un limón.
1 litro de agua.

Preparación

Lo primero que haremos es poner a hervir ese litro de agua. Una vez caliente, añade esas cinco ramas de perejil para que se haga una adecuada cocción a lo largo de 20 minutos. Pasado ese tiempo, apaga el fuego y permite que repose durante una hora.

¿Siguiente paso? Cuela el contenido y quédate con el agua resultante, para añadirle después el jugo de un limón. Si bien el sabor es un poco fuerte, es realmente efectivo para eliminar el exceso de sal del organismo.

Tómalo a lo largo del día a temperatura ambiente, el primero en ayunas y los siguientes, 20 minutos después de tus comidas.

2. Agua de fresas con limón

El agua de fresas, además de una bebida deliciosa y refrescante, es un remedio diurético excelente para depurar grasas, para obtener un buen aporte de vitaminas y minerales y, a su vez, eliminar grasas. Te ayudará también a eliminar la retención de líquidos producida por el exceso de sal en el organismo.

Ingredientes
10 fresas limpias.
1 litro de agua.
El jugo de un limón.

Preparación

Es realmente fácil de preparar. Si lo deseas, puedes tomar el licuado de perejil a lo largo de tres días seguidos, para después, continuar con este tratamiento a base de agua de fresas que completará, a lo largo de la semana, nuestro objetivo de eliminar el exceso de sal y grasa. Lo primero que haremos es poner a hervir ese litro de agua.

Después, corta las fresas por la mitad y llévalas a esta agua caliente para permitir que se haga la cocción durante media hora. Las fresas deben quedarse muy blanditas. Cuando veas que ya han sacado todo su jugo, retíralas y cuela el contenido.

El siguiente paso es llevar esta agua a una jarra y añadir el jugo de un limón. Añade unos cubitos de hielo y bébelo fresquito a lo largo del día, en especial después de tus comidas.

3. Cómo sustituir la sal en tus comidas

Aunque no lo creas, existen opciones realmente sabrosas y adecuadas para sustituir la sal de nuestros platos.

¿Quieres saber de qué se trata? Toma nota y pruébalas. Verás como no echas en falta la sal en ningún momento.

Es cuestión de “cambiar el chip” y elegir siempre alternativas más saludables: El ajo. El orégano. El romero. La pimienta negra. El curry.

4. ¡Tenemos que sudar más!

El exceso de sal y grasa se elimina y se quema sudando, poniendo en marcha nuestro corazón y ejercitando nuestro cuerpo. Lo sabemos, a veces cuesta, no tenemos tiempo y es difícil encontrar ese hueco.

No obstante, debes tener muy en cuenta que estos dos grandes enemigos son los más peligrosos, los que más estragos pueden causar en tu salud, así que, ¿por qué no empezar a “sudar” hoy mismo? ¡Hay que eliminar toxinas!

Sería ideal que practicaras alguno de estos ejercicios:
Correr 20 minutos. Andar media hora a paso rápido. Ir en bici media hora. Bailar.

5. ¡Bebe más agua!

Te lo recomendamos muchas veces en nuestro espacio. Beber agua es necesario, ya que es vital para nuestro organismo, pero aún lo es más en esos momentos en que sufrimos un exceso de sal, cuando nos sentimos más hinchadas de lo normal o cuando, por ejemplo, vemos que nuestros tobillos están muy inflamados.

Generalmente unos tobillos hinchados suelen ser síntoma de un mal funcionamiento renal, así que no dudes en beber un poco más de agua cada día (entre 8 y 9 vasos).

Eliminarás el exceso de sal, favorecerás la salud de tus órganos y todo ello te permitirá depurar tu organismo y esas grasas almacenadas.