Baño Sonoro: Cuando el terapeuta del sonido hace sonar los cuencos tibetanos de una forma correcta y armónica a través de su frotación y percusión, genera vibraciones que se expanden a través de frecuencias de sonido de características peculiares, que son percibidas por la estructura auditiva del oyente.

Estas frecuencias envuelven a la persona brindándole una sensación de «baño sonoro», relajación y placer, como consecuencia de la influencia de estos sonidos en el metabolismo celular, equilibrándolo, y haciendo accionar los mecanismos de segregación de endorfinas.Masaje Sonoro: Este masaje es consecuencia del apoyo de los cuencos tibetanos sobre los centros energéticos o «chacras» de la persona.

Al vibrar los cuencos en ese estado la persona no solamente tiene acceso a la escucha de los sonidos de las vibraciones, sino también a la manifestación física de las mismas a través de todo su cuerpo, aumentando aún más la sensación de equilibrio, placer y placer.Esta armonización es recomendada para personas que quieran atravesar una experiencia de elevación espiritual, y también para aquellas con dificultades producidas por el stress, problemas de insomnio, dolencias óseas, contracturas musculares, entre otras.
Baño Sonoro: Cuando el terapeuta del sonido hace sonar los cuencos tibetanos de una forma correcta y armónica a través de su frotación y percusión, genera vibraciones que se expanden a través de frecuencias de sonido de características peculiares, que son percibidas por la estructura auditiva del oyente. Estas frecuencias envuelven a la persona brindándole una sensación de «baño sonoro», relajación y placer, como consecuencia de la influencia de estos sonidos en el metabolismo celular, equilibrándolo, y haciendo accionar los mecanismos de segregación de endorfinas.Masaje Sonoro: Este masaje es consecuencia del apoyo de los cuencos tibetanos sobre los centros energéticos o «chacras» de la persona. Al vibrar los cuencos en ese estado la persona no solamente tiene acceso a la escucha de los sonidos de las vibraciones, sino también a la manifestación física de las mismas a través de todo su cuerpo, aumentando aún más la sensación de equilibrio, placer y placer.