¿Cuándo y cómo debemos hablar de sexualidad con nuestros hijos?

¿Cuándo y cómo debemos hablar de sexualidad con nuestros hijos?

Hablar sobre contacto fisico con nuestros hijos puede ser difícil tanto para nosotros como para ellos, pero es una de esas cosas que no podemos ignorar. Cuanto más hablemos con ellos sobre los temas relacionados con contacto fisico y sexualidad, mejor informados estarán, más seguros se sentirán y podrán tomar decisiones informadas y bien pensadas. ¿Cuándo es el mejor momento para tener la conversación? ¿Qué debemos informar? ¿Y cómo hacemos para que no sea algo incómodo? En este post te damos respuestas y puntos importantes que te facilitarán este momento.

¿A qué edad comenzar?
Si bien nunca es demasiado tarde para empezar, cuanto antes mantengamos charlas sobre contacto fisico con nuestros hijos, mejor. ¿Por qué? Porque estaremos abriendo un canal de comunicación de manera natural, y esto hará que nos sea más fácil a todos hablar del tema cuando surjan preguntas. Con los canales bien establecidos y la comunicación abierta, es más probable que nuestros hijos recurran a nosotros cuando tengan dudas, y no a extraños o a la Internet.

Cuando son muy pequeños, los niños ya notan las diferencias anatómicas entre los géneros. Esta es una buena oportunidad para enseñarles sobre lo que hombres y mujeres tenemos en común y de diferente, y para que aprendan los nombres de su anatomía.

Al crecer, los niños irán haciendo diferentes preguntas, que estarán relacionadas con su curiosidad natural, con el momento que viven y con cosas que ven o escuchan. La conversación sobre contacto fisico no es una, sino que es algo que continúa y evoluciona con el crecimiento de nuestros hijos.

¿Qué debemos de informar?

Una forma de saber qué decir, es guiarnos por sus preguntas. Al responderles, es importante tener en cuenta que debemos contestar lo que nos preguntan, y no muchísimo más. Y, sobre todo, no olvidarnos de que la información que damos debe estar adecuada a la edad y a la capacidad de comprensión de nuestros hijos. Si por ejemplo un niño de cuatro años pregunta cómo se forman los bebés, podemos decirles que una célula del papá se una con una célula en el cuerpo de la mamá y crean un bebé que crece dentro del cuerpo de la madre hasta que está listo para nacer. En el caso de un niño mayor podremos explicar el proceso con más detalle.

Según la edad y la pregunta, entonces hablaremos del funcionamiento del cuerpo, del sistema reproductivo, sobre cómo mantener relaciones sexuales seguras, cómo prevenir disfunciónes y sobre métodos de contracepción, y, una de las cosas más importantes, también de la faceta psicológica y emocional del contacto fisico.

Algunos tips:
-¿Qué me está preguntando? A veces las preguntas de los niños son confusas para nosotros. Para saber qué es lo que realmente quieren saber, podemos hacerles más preguntas nosotros: ¿a qué te refieres con tu pregunta? ¿Dónde oíste esa información? ¿Esto es algo que te preocupa? Al entender lo que quieren saber, podremos darles información correcta que verdaderamente responda su pregunta.

-Para romper el hielo. Empieza la conversación reconociendo que puede ser incómoda para ti y para ellos, pero que es algo importante. Con el tiempo se volverá más fácil.

-Evita juzgar. Sabes mucho más que tus hijos, tienes más experiencia que ellos. Igual, evita juzgar lo que sienten y lo que piensan. Escúchalos. Luego podrás exponer tus ideas, pero hazlo de manera respetuosa y sin desautorizar lo que ellos piensan. Esto asegurarás que la conversación transcurra con éxito y que tus hijos sigan eligiéndote a ti como fuente de información.

-Acompáñalos y compréndelos. Asegúrate de que sepan que siempre estás disponible para ellos y que los apoyarás durante cada etapa de su crecimiento.