Todo influye a la hora de elegir un buen anticonceptivo. Cada una de ustedes tienen el poder de decidir el método anticonceptivo a usar, nadie lo pone en duda, pero es básico que antes de probar el que utiliza tu amiga del alma, el que te recomendó la doctora de moda o aquel sobre el que leíste en alguna revista; evalúes dos puntos básicos: tu edad y el tiempo en que deseas embarazarte.

Comúnmente los ginecólogos nos basamos en estos aspectos y sumamos el estado de salud y hábitos de nuestras pacientes. Lo que da como resultado que las agrupemos en seis categorías que dan pauta a la alternativa anticonceptiva a sugerir. Así tenemos a:

1. Mujeres curas

Quienes se encuentran con un estado de salud adecuado, sin exceso de peso, no padecen enfermedades crónicas, ni tienen infecciones venéreas.

Anticonceptivo recomendado: Cualquiera de acuerdo a su edad y al tiempo en que desee tener un bebé, se recomienda consultar al ginecólogo sobre el anticonceptivo seleccionado.

2. Mujeres entre los 20 y 35 años

Cuentan con madurez reproductiva, energía y vitalidad física-mental.

Anticonceptivo recomendado:

– Si desean un embarazo próximo, existen alternativas anticonceptivas hormonales efectivas y temporales como: la píldora de una toma diaria, el parche de uso semanal y el anillo mensual fácil de usar, todos ellos con estrógeno y progestina.

– También está la inyección que se aplica cada dos o tres meses con progestina así como una nueva opción oral con hormonas idénticas a las que la mujer produce (estradiol) con ciclos menstruales más cortos y ligeros.

– Si planean un embarazo a futuro: están los métodos de larga duración que son muy efectivos, como el implante subdérmico (que protege durante 3 años) y el dispositivo intrauterino (dependiendo de la elección, la protección va de 3 hasta 10 años).

3. Mujeres con enfermedades crónicas

Aquellas que tienen enfermedades de larga duración y progresivas como problemas cardiacos, respiratorios, diabetes, antecedente de trombosis e hipertensión arterial.

Anticonceptivo recomendado:

– Con antecedente de evento trombótico: sólo anticonceptivos con progestina como píldoras con progestina, inyectables (bimestral o trimestral), implante subdérmico (una varilla muy pequeña que se inserta en el antebrazo) y dispositivo intrauterino.

– Con enfermedades crónicas como hipertensión, diabetes, enfermedad renal o hepática así como fumadoras o pacientes obesas: anticonceptivos con progestina como inyección, pastillas, implante subdérmico e inyectables.

4. Mujeres lactantes

Quienes están lactando de manera absoluta o intermitente (que combinan con la fórmula). Se buscan opciones que no reduzcan la producción de leche ni tengan efectos secundarios para el bebé.

Anticonceptivo recomendado:

– Solo con progestina, como píldoras con esta hormona, los inyectables bimestrales o trimestrales, implante subdérmico, dispositivo intrauterino liberador de levonorgestrel o el dispositivo de cobre que no libera ningún tipo de progestina ni estrógeno.

5. Mujeres adolescentes

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), se considera a las chicas de 13 a 19 años. Los anticonceptivos en este periodo evitan embarazos no deseados, la conducta en la actualidad es sugerir a ellas los métodos de larga duración.

Anticonceptivo recomendado:

– Implante subdérmico que no requiere constancia de la usuaria y protege durante 3 años, es discreto y cómodo. También se encuentra el dispositivo intrauterino en cualquier modalidad. Se indica realizar un ultrasonido para checar la cavidad uterina de la mujer y colocar la opción adecuada.

6. Mujeres pre-menopaúsicas

Mujeres que pasan de los 40 años, que empiezan a tener irregularidades en la menstruación pero que continúan ovulando.

Anticonceptivo recomendado:

– Píldoras, dispositivo intrauterino con levonorgestrel que les ayuda a disminuir el sangrado y el dolor que suele aumentar en esta etapa, así como el anillo anticonceptivo (que aumenta la libido y que no implica tener una preparación previa a tener relaciones) y el implante subdérmico.

Te recomendamos acudir a tu ginecólogo, quien te presentará las sugerencias adecuadas para ti, según tu estado de salud general y los factores de riesgo que presentas para distintas enfermedades. Si eres una paciente cura con un estilo de vida saludable y tus riesgos son mínimos, entonces la decisión es tuya. Recuerda que el mejor método es el que te hace sentir cómoda, no altera tu salud y se adapta mejor a tus necesidades.

POR: Dr. Alejandro Rosas Balan

** El Dr. Alejandro Rosas Balan es Ginecoobstetra y Biólogo de la Reproducción Humana. Médico titular en el Instituto Nacional de Perinatología. Unidad de Investigación en Medicina de la Adolescente