HIERBAS NATURALES PARA TRATAMIENTO DEL LUPUS

El lupus es una disfunción autoinmune (que crea anticuerpos) crónica, en donde el sistema inmunológico (sistema de defensa del cuerpo) comienza a atacar las células saludables de cualquier parte del cuerpo, aunque las zonas más afectadas son por lo general el corazón, las articulaciones (por lo que se considera una disfunción reumática), los músculos, daña la piel, los vasos sanguíneos y los órganos principales como los pulmones, el hígado, los riñones y los sistemas del cuerpo como el sistema nervioso.

Síntomas de Lupus:

Al tratarse de una disfunción que puede afectar a varios órganos, puede presentar diverso síntomas:

• Cansancio y agotamiento sin mucho esfuerzo.

• Pérdida de peso inexplicable.

• Fiebre prolongada.

• Síntomas articulares y musculares como inflamación y/o dolor en las articulaciones (artritis), por lo general en las manos, muñecas, codos, rodillas y pies.

• Rigidez articular.

• Piel en mal estado, dañada y afectada. Pueden empezar a aparecer manchas.

• Enrojecimiento y erupción en las mejillas (más frecuente denominada “eritema en alas de mariposa”)

• Caída del cabello en Lupus avanzado.

• Hipersensibilidad a los rayos ultravioletas.

• Si afecta a los pulmones o el corazón estos se inflaman, lo cual puede ocasionar pericarditis y pleuritis (inflamación de la pleura). Estas afecciones pueden ocasionar dolor torácico y fiebre, en algunos casos (cuando ataca al corazón) insuficiencia cardiorrespiratoria.

• Si ataca al riñón, el síntoma es la inflamación (nefritis), que a veces impide que el riñón elimine adecuadamente los residuos del organismo y estos se acumulan en la sangre. La inflamación impide asimilar y retener proteínas, lo cual puede ocasionar hinchazón de cara y piernas.

• En el caso de que ataque al cerebro, lo resentirá el sistema nervioso. Pudiese haber dolores de cabeza, depresiones, ansiedad, acentuación del miedo, hiperactividad, angustia, etcétera. Muchos veces estos síntomas pudiesen deberse no tanto a que la disfunción los desencadene, sino a que el paciente se siente atacado por una disfunción que puede afectar a tantos órganos de su cuerpo.
Puede provocar osteoporosis, bursitis, espondilitis anquilosante, fibromialgia, gota, lumbalgia, tendinitis, etcétera.

Causas:

La causas biológicas son desconocidas, sin embargo, se dice que al tratarse de una disfunción autoinmune, pudiese haber factores relacionados a la salud del sistema inmunológico. Las hipótesis que se manejan son:

• La genética.

• La exposición a determinado tipo de ambiente (como la sobreexposición a la luz solar, ya que algunos de los pacientes presentan fotosensibilidad a los rayos ultravioletas).

• Un deficiente funcionamiento de los estrógenos femeninos (se cree que las píldoras anticonceptivas pudiesen acelerar su aparición en mujeres genéticamente predispuestas).

Por otro lado, en medicina energética si existe una causa que pudiese predisponer a este padecimiento: la desilusión, el enojo reprimido, el perder esperanza y ya no querer “defenderse” (o castigarse o exigirse uno mucho) es la raíz, es el factor emocional de dicha afección. En medicina energética, el cuerpo habla lo que uno sientes y piensa. El cuerpo es el reflejo claro de lo que sentimos; basta con ver los síntomas del cuerpo para poder deducir lo que sucede interiormente. Cualquier disfunción puede irse por donde vino si se erradica la causa emocional que le esta dando lugar.

Así que se aconseja (opinión de Laura Garcés, autora del artículo), como punto de partida para tratar y erradicar dicha disfunción, la auto observación consiente, lo más probable es que haya demasiada insatisfacción y desilusión en la vida, esta uno siendo atacado constantemente por ideas y pensamientos negativos, autoexigentes y deprimentes, se pasa el mensaje de “preferible irse a afrontar lo que tengo por delante”, así que habría que empezar a revalorar la forma en como estamos no sólo pensando la vida sino actuando en ella, encontrar razones y pensamientos que den nuevas perspectivas para vivir, y atreverse a actuar a partir de convicciones más gozosas y entusiastas, tomando en cuenta que la vida es lo que pensamos.

Alimentación contra el Lupus

Cuando el cuerpo está en un estado de inflamación, se produce una mayor liberación de radicales libres, por lo que debemos contrarrestarlos con alimentos ricos en antioxidantes. Las frutas y verduras son los alimentos que más cantidad de antioxidantes para combatir la inflamación.

Vitaminas C y E, betacaroteno, selenio, zinc y flavonoides son otros de los elementos que debemos incluir en nuestra dieta.

Si estamos llevando a cabo el tratamiento tradicional y queremos evitar los problemas cardiovasculares asociados con los corticoesteroides, podemos consumir alimentos con vitamina B6 y B12, junto con ácido fólico. Esto se encuentra en vegetales de hoja verde, frutas y panes integrales.

Debemos cambiar el tipo de grasas que consumimos, ya que ayuda a reducir los síntomas de inflamación. Por ejemplo, las grasas provenientes de animales liberan un ácido que aumenta la inflamación; además los fritos, la comida rápida o congelada y las sopas y salsas cremosas aumentan los niveles de colesterol, que a su vez aumenta los niveles de inflamación.

Es importante tener una dieta balanceada que contenga muchas frutas, verduras, granos integrales.

El omega 3 lo encontramos en las nueces, las semillas de linaza, el aceite de canola y el de oliva.

Existen numerosas plantas medicinales para reducir la inflamación producida por el Lupus: desde el pino marítimo francés, hasta la yuca, la ortiga, la cúrcuma, la bromelina y la Santamaría.

Una planta que tiene grandes efectos, ya que no solo es antiinflamatoria sino que también imita las propiedades de los corticosteroides es la matricaria.

Para calmar los dolores no hay nada mejor que la valeriana y la pasiflora. También podemos utilizar aceites esenciales de forma tópica para aliviar inflamación y dolores: menta, árbol de té o alcanfor son algunas de las opciones más adecuadas.

En la medicina tradicional china se suele utilizar el rayo de Dios, una hierba que sirve para tratar una variedad de trastornos del Lupus, principalmente la inflamación, relaja al sistema inmune y mejora la artritis. La boswellia y el té verde tienen propiedades similares.

Sin duda alguna, la alimentación y las plantas medicinales contra el Lupus pueden ayudar, pero lo ideal sería consultar con un médico antes de tomar medidas, y ver en qué casos se puede usar como único tratamiento o como tratamiento complementario.