El estrés aparece como una reacción del cuerpo ante diferentes situaciones o pensamientos, provocados en su mayoría por la frustración, furia y miedo.

Uno de los beneficios del estrés, es que nuestro cuerpo reacciona cuando nos encontramos ante situaciones de peligro o riesgo.

Sin embargo, las personas que experimentan tensiones más fuertes, pueden sufrir graves problemas de salud tanto física como emocional, y lo preocupante del estrés, es que si no se controla, se pueden ver afectados distintos órganos que disminuyen la calidad de vida, por lo que se debe prestar atención a los cambios en nuestra salud.

Sin embargo, el estrés crónico puede alterar tu vida de forma permanente.

Puede ejercer una tensión constante sobre el corazón. ¿Cómo? Aumenta la presión arterial, el colesterol y los triglicéridos en la sangre. Además el estrés extremo puede ocasionar que este órgano palpite fuera de su ritmo, afirma un artículo de la Biblioteca Nacional de Medicina en Estados Unidos.

La piel también es un órgano. Y en éste el efecto del estrés es evidente, provoca que se genere acné en el rostro. Esto se debe a que la tensión provoca una respuesta inflamatoria en el cuerpo que lleva a los poros a obstruirse en primer lugar y, posteriormente, a romperse, que se traduce en enrojecimiento de la piel y acumulación de pus.

Hígado. Durante los períodos de estrés, los linfocitos citolíticos se extienden por el hígado y en algunos casos contribuyen a la destrucción de hepatocitos y a la agudización de las enfermedades hepáticas, señala un artículo de la HCV Advocate: Hepatitis C.

El estrés genera hormonas (principalmente el cortisol) que influyen sobre la corteza prefrontal, región cerebral que controla acciones como la memoria y toma de decisiones. Si esta emoción se experimenta de forma cónica, puede deteriorar las habilidades mentales como la atención y concentración, indica un estudio publicado en la revista Neuron.

De acuerdo con Luis Carlos Sabbagh, gastroenterólogo, Durante un suceso estresante el sistema nervioso central ejerce influencia directa a través de las hormonas y de los neurotransmisores sobre la región del colon, razón por la que se presentan síntomas como la inflamación, dolor y gases.

Debilita las funciones de los pulmones . De acuerdo con una investigación de la Universidad de Sao Paulo, también podría existir una relación entre el estrés, el asma y la capacidad de mantener equilibrio.

De acuerdo a información de la Clínica Baviera, del Instituto Oftalmológico Europeo, el estrés puede causar temblor de ojos , el cual se produce en un pequeño músculo que sirve para elevar el párpado. Sin embrago, no es todo, ya que puede causar inflamación y visión borrosa.

El cortisol ocasiona la excreción de fosfato de los riñones. En concentraciones altas, el cortisol, como la aldosterona, pueden provocar retención de sodio y fluidos.