En este post te ponemos una ilustración para que veas claro como afecta el jugo de taronja cuando se mezcla con algunos medicamentos.
Si ves con atención de que medicamentos se trata y los tomas, te recomendamos que hagas caso a los consejos que pone la imagen.
El jugo de Taronja interfiere en la química de algunos medicamentos modificando su acción.
Por ejemplo los medicamentos que reducen el colesterol.
En ese caso puede multiplicar el efecto pudiendo provocar una sobredosis.
En casos de medicamentos para la alergia, hace lo contrario, disminuyendo su efecto.
El efecto del pomelo parece ser debido a su contenido en furanocumarinas.
Estos compuestos presentes en el zumo de pomelo pueden inhibir el citocromo p450 3A4, lo que origina una disminución de la degradación del medicamento y por ello un mantenimiento de su concentración en la sangre.
Ello podría ocasionar un “exceso” de accción del medicamento y en ciertas situcaciones podría conllevar ciertos riesgos.
Sin embargo el pomelo a su zumo no afecta a la acción de todos los medicamentos; aquellos fármacos que utilizan procesos metabólicos diferentes al citocromo p450 en su degradación, no se afectan por el zumo de pomelo.
Hay que considerar además que existen diferencias y variaciones individuales en las interacciones entre pomelo y medicamentos.
Algunas personas son más sensibles, y con menor cantidad de zumo pueden presentar síntomas tóxicos, y otras más resistentes requieren mayores cantidades de la fruta para manifestar esas respuestas.
Los fármacos con los que interacciona el jugo de pomelo son:
– Antihistamínicos: utilizados en reacciones alérgicas
– Antifúngicos: utilizados para tratar afecciones producidas por hongos
– Estatinas:utilizados para reduicr el colestrol
– Antidepresivos y otros neurofármacos (Triazolam, Diazepam, Alprazolam, Carbamazepinas, Midazolam)
– Fármacos inmunosupresores como la Ciclosporina y el Tacrolimus.
– Antihipertensivos como los antagonistas de los canalaes de calcio (Nimodipina, Nitredipina, Felodipina, Nisoldipina) y algunos bloquenates de la angiotensina II.
– Fármacos para la disfunción erectil como el sildenafilo, taladafilo, vardenafilo.
– Algunos fármacos antidiabéticos como la tolbutamida.