El tomillo es una planta muy buena para el sistema inmunitario ya que levanta las defensas y es antiséptico. Se utiliza para catarros de las vías altas, sinusitis y asma.

Actúa como antiséptico y expectorante.

Por otro lado, también puede usarse contra problemas gastrointestinales y de digestión, puesto que el tomillo evita la formación de gases y puede resultar útil en casos de indigestión, flatulencias o dolores de estómago.

Otra de las propiedades del tomillo es su efecto desinfectante, cicatrizante y antiséptico, por lo que resulta muy apropiado para tratar heridas. Hierve tomillo en un cazo con agua y aplícalo sobre la zona afectada, notarás mejoría en poco tiempo.

Asimismo, el tomillo es una planta rica en hierro, de tal forma que puede usarse para suplir las deficiencias de este mineral, en casos de anemia.

Al ser una planta aromática, también actúa como repelente de insectos y, por lo tanto, podrás usar el aceite de tomillo para protegerte de las picaduras de estos animales.

En cuanto a las posibles contraindicaciones del tomillo, será necesario que previamente a consumirlo, consulten con su médico:

Embarazadas
Mujeres en periodo de lactancia
Personas con problemas digestivos como úlcera de estómago