UNA AYUDA PARA REBAJAR: CAMINATA NORDICA

Estas fiestas vamos a abusar de todo, y debemos recuperar el equilibrio antes de que nuestra salud lo acuse, una medida muy aconsejada es la caminata nordica.
La caminata nórdica (o nordic walking) es una actividad aeróbica de bajo impacto que consiste en caminar con la ayuda de un par de bastones especiales, imitando los movimientos del esquí de fondo.

Esta forma de marcha se realiza al aire libre y puede practicarse en distintas superficies (parques, playas, montañas, etc.). Puede encararse como actividad relajante, ejercicio intenso o deporte de resistencia, según el ritmo de los movimientos y el objetivo perseguido por cada practicante.

ORIGEN
Su inicio se remonta a la década de 1930, cuando el equipo finlandés de esquí decidió incluir en su entrenamiento de verano los movimientos que hacen a la técnica de esquí. Esta práctica resultó tan positiva, que fue adoptada rápidamente por los esquiadores de otros países.

La forma actual de caminata nórdica comenzó a fines de la década de 1990, cuando los profesionales de la Asociación Central para Deportes Recreativos y Actividades al Aire Libre de Finlandia, y el Instituto Finlandés de Deportes, juntaron sus esfuerzos con un fabricante local de bastones para adaptar los bastones de esquí y combinar los movimientos típicos del esquí, el senderismo y el running, con el objetivo de desarrollar una nueva técnica que pudiera ser practicada por toda la población (y no sólo por los esquiadores).

TÉCNICA
Existen diferentes técnicas para practicar esta disciplina (Rutlin, ALFA 247, Kantaneva, etc.).
movimientos
Según los expertos, todas estas técnicas comparten los mismos lineamientos básicos: la biomecánica es igual que en el andar, los hombros deben estar relajados, el paso debe ser confortable, la vestimenta deben ser la adecuados, y los bastones deben ser los apropiados para la estatura del caminante. Además, durante la práctica se realizan cambios de ritmo (marcha, paso acelerado, etc.), y se alterna entre movimientos cortos y largos de brazos y piernas.

No obstante, aconsejan consultar con un instructor especializado en caminata nórdica cuál es la técnica más conveniente para cada caso particular. También remarcan la importancia de aprender la disciplina con un instructor, puesto que los resultados positivos y la falta de contraindicaciones dependerán de la correcta ejecución de las distintas técnicas.

BENEFICIOS

Según la INWA (Asociación Internacional de Caminata Nórdica), el agregado de los bastones en al andar contribuye a ejercitar el 90% de los músculos del cuerpo (abdominales, brazos, torso, piernas, etc.) y facilita el tránsito por diversos terrenos (pendientes, superficies deslizantes, etc.).

Aclara también que practicada en forma regular: mejora la capacidad cardiovascular y la oxigenación; aumenta la resistencia, la coordinación y la movilidad; incrementa hasta en un 40% el consumo de energía con respecto a la caminata clásica; disminuye la presión sobre las articulaciones; mejora el equilibrio y la movilidad del tren superior; contribuye a prevenir la osteoporosis; estimula la liberación de hormonas responsables de controlar el estrés y retardar el proceso de envejecimiento; reduce la ansiedad y favorece las funciones cognitivas.

La caminata nórdica propone una forma sencilla y divertida de encarar la actividad física. Además, como su aprendizaje es muy rápido y la sensación de cansancio durante la práctica es baja, puede ser practicada por personas de todas las edades.